jueves, 24 de abril de 2014

319. LO POCO.

Últimamente he reflexionado bastante sobre las causas que me llevan a adquirir ciertos hábitos. Y he llegado a la conclusión de que se trata, más o menos, de las mismas razones que me conducen al abandono de algunas otras inercias.

Estoy hablando, por ejemplo, de esta manía de airear en público los estados de ánimo o de la obsesión por fotografiar cada cosa y cada instante. 

Por el camino, me he desacostumbrado a casi todo.

No es que ahora sea feliz con poco. Es que ahora soy feliz con lo poco.

No hay comentarios:

Publicar un comentario